Arrestan a una famosa abogada por el crimen de su hija de 12 años
El padre, periodista, también está imputado por el homicidio. Creen que la mataron porque la nena era la heredera una cuantiosa fortuna.
Galicia y España entera están profundamente conmovidos por el trágico asesinato de una niña de 12 años en Santiago de Compostela, hija de una importante abogada y un periodista.Ambos padres, divorciados, están imputados por homicidio y, al parecer, el móvil del crimen es económico, ya que la nena sería heredera universal de la cuantiosa fortuna de sus abuelos, padres de la abogada.
Rosario Porto, la madre de Asunta
Asunta Basterra, apareció muerta en la madrugada del domingo en una zona apartada de la localidad de Feros, La Coruña, con evidentes signos de violencia. La nena había nacido en China y fue adoptada cuando tenía un año por Rosario Porto y Alfonso Basterra. Era una excelente alumna, simpática, que atendía un curso superior al que le correspondía, estudiaba ballet y música y tenía un blog sobre las plazas de Santiago de Compostela.
Alfonso Basterra, padre de Asunta, es un periodista bilbaíno afincado en Santiago de Compostela. Ha sido detenido por el crimen de su hija.
Los padres denunciaron su desaparición el sábado por la noche y horas después la Guardia Civil encontró su cadáver. El crimen tuvo una gran repercusión por lo atroz del asesinato y la notoriedad de Rosario Porto, abogada de prestigio miembro de una acaudalada encumbrada familia. La letrada, 44 años, era cónsul de Francia en Santiago de Compostela y fue condecorada por el gobierno francés.
La Guardia Civil determino que Asunta no fue asesinada en el lugar donde apareció el cadáver. “Fue trasladado a un lugar aparentemente visible para que fuese encontrado pronto”, confió el delegado del gobierno de Galicia Samuel Juárez, quien añadió que “los investigadores no descartan absolutamente nada”.
En medio de grandes escenas de dolor de la familia y vecinos de la víctima se produjo la cremación de su cadáver. Al finalizar la ceremonia, la policía se aproximó a la abogada Porto y la detuvo ante el asombro generalizado de quienes estaban presentes. Hubo protestas y comentarios favorables a la madre que recogieron los periodistas.
Pero la policía estaba convencida de que Porto estaba implicada en el asesinato de su hija por una serie de indicios. Primero, atrajo la atención de los investigadores con un extraño relato sobre una agresión, ocurrida en junio pasado. Dijo que por un descuido dejó las llaves de su departamento, ubicado en la zona céntrica de Santiago de Compostela, puestas en la puerta. A las 2.30 oyó gritar a su hija y cuando se levantó y acudió a ayudarla encontró “un intruso de 1,60 de estatura, complexión fuerte, vestido con ropas oscuras y guantes de latex”.
El individuo intentaba asfixiar a Asunta y cuando la madre se abalanzó sobre él, según declaró a la policía, éste la empujó contra una pared y sufrió un fuerte golpe en la cabeza. Pero, insólitamente, la abogada no alertó a la policía y acordó con su exmarido no hacer ninguna denuncia para no provocarle “un trauma”.
Porto insistió en que su relación con su hija era excelente. Lo mismo declaro el periodista Alfonso Basterra, padre de la víctima, ahora imputado por homicidio.
Otro indicio muy importante es que la policía controló desde un primer momento numerosas cámaras de vigilancia ubicadas por toda la ciudad compostelana. Porto había declarado que se había separado de su hija a una hora temprana pero los videos de seguridad revelaron una escena en donde se ve a la abogada y su hija en el automóvil familiar a una hora muy posterior a la que ella manifestaba.
Además, en un chalet de Porto, ubicado en la localidad de Teo a tres kilómetros de donde fue encontrada la víctima, se habrían encontrado restos de un cordel color naranja que fue utilizado en el asesinato.
El juez apreció “incongruencias y ambigüedades” en el testimonio de Rosario Porto, así como “versiones contradictorias sobre la desaparición de la menor” por lo que decretó su detención, primero, y después la imputó por homicidio.
A últimas horas de la noche de ayer, circuló una versión de que el móvil del asesinato podría haber sido económico. Asunsta sería la heredera universal de la fortuna de sus abuelos, un importante patrimonio del abogado Francisco Porto Mella y su esposa la profesora universitaria María Ortega Romero. Ambos fallecieron repentinamente el año pasado, con una diferencia de siete meses.
Los abogados de Rosario Porto y Alfonso Basterra, los padres de Asunta, la niña hallada muerta el pasado fin de semana en una pista forestal cerca de Santiago, han comunicado que dejarán de asistir a sus patrocinados.
Aunque ambos han estado presentes en el interrogatorio que se ha prolongado durante varias horas en la mañana de este viernes, el abogado de Alfonso B., Roberto Goris, ha explicado que "no asistió" al detenido, y ha abundado en que se trata de cuestiones "estrictamente técnicas", al no ser especialista penalista.
También el letrado que acompañó a la madre de la menor, Juan Guillán, se ha desvinculado de la defensa de Rosario P. O., con cuyo padre tenía una relación de amistad.
Tanto Guillán como Goris, aunque ahora no pertenecen al mismo despacho de abogados, compartieron bufete en Santiago de Compostela.
Por su parte, el juez ha declarado prisión sin fianza para Rosario Porto, y para José Antonio Vázquez Taín, el padre de Asunta Basterra, la niña hallada muerta en una pista forestal del municipio coruñés de Teo, en el entorno de Santiago. La primera está acusada de un delito de homicidio a la espera del informe psicológico y el segundo por un delito de homicidio, una imputación que podría ser modificada por la de asesinato según los hallazgos que revelen los resultados de toxicología.
La mujer ha llegado sobre las 8.10 horas de la mañana de este viernes a los juzgados compostelanos para prestar declaración ante el juez. Rosario Porto llegó en un coche policial sin rotular, escoltada por un vehículo de la Guardia Civil y por otro turismo sin rotular. En un principio se había informado de que Rosario Porto se habría negado a comparecer, pero finalmente la mujer ha declarado durante tres horas y media.
"Mi madre es una psicótica"
En un princio la Guardia Civil investigó si el móvil del presunto asesinato de la pequeña Asunta podía ser debido a la herencia que sus abuelos le habían dejado. Esta tesis perdió fuerza tras comprobarse que los abuelos hicieron el testamento en 1975 dejándo todos los bienes a nombre de su madre, Rosario Porto. La investigaciones tratan de aclarar si, tras llegar la menor a la familia, los abuelos que tenían una estrecha relación con ella, podrían haber modificado el testamento para dejarle algunos bienes.
Los análisis forenses realizados al cuerpo de la menor han determinado que Asunta estaba drogada el día de su muerte, posiblemente por diazepam. Una medicación que se utiliza para tratar casos grabes de ansiedad y que su madre, posiblemente estaría tomando. Según informa la página web de Telecinco, tras haber sido sedada, Asunta fue atada de pies y manos para evitar movimientos en caso de despertarse. La autopsia determinó que la niña fue asfixiada por sofocación pudiendo utilizarse una almohada u otro objeto para obstruir las vías respiratorias. Según este canal, la madre presuntamente podría haber pedido ayuda al padre para que le ayudara a trasladar el cuerpo de la menor.
Por otro lado dos profesoras de la menor han asegurado que en el mes de julio Asunta llegó drogada al colegio y que tuvieron que tumbarla. Según ha informado el programa de Ana Rosa, la pequeña les dijo a sus compañeras de clase ese día: "Mi madre es una psicótica". Ese día una de las profesoras que atendió a la menor escribió un mensaje vía teléfono móvil a otra de las docentes diciéndole: "Ha tomado muchas pastillas y está K.O".
La historia, a la que no le falta un gramo de oscurantismo, se completa con la revelación hecha por El Mundo que asegura que la menor comenzó a escribir un blog en el mes de julio de 2012, fecha en la que murieron sus abuelos. Sólo tiene dos entradas y la primera cuenta una historia de una familia feliz compuesta por un padre, una madre y el hijo, en el que matan a los padres. Según este blog, iba a ser escrito también por otra persona, una joven que le daba clases partículares a la menor.
Según revela el diario El País, la policía ha descartado investigar más muertes en este tema. La declaración viene después de que una mujer que se identificara como prima segunda de Rosario Porto, asegurara ayer a los medios en Santiago de Compostela, que los padres de Porto murieron de una forma muy sospechosa. Según esta mujer, ambos estaban bien, pero primero apareció muerta la madre de Rosario Porto en la cama, y siete meses después, el padre.
Las prisas en el abandono del cadáver de Asunta Basterra son evidentes,no sólo porque el cuerpo quedase en una cuneta, a la vista de todo el mundo, sino porque sus verdugos se dejaron olvidada una cuerda naranja, la misma que se halló en una bobina en la casa de campo de la madre,Rosario Porto, pista clave que motivó su detención inmediata.
Los investigadores consideran probable que las marcas halladas en brazos y tobillos de la pequeña sean compatibles con las pequeñas lesiones que quedarían si hubiese sido atada con una cuerda como la encontrada junto a ella.Creen que Asunta Basterra pudo ser atada y que permanecía así cuando fue trasladada a la pista forestal en la que apareció.
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